La felicidad de poder estar viviendo eso que te propusiste para vos, la felicidad de sonreír cuando las cosas comienzan a salir bien, la felicidad de tenernos y de poder abrazarnos, la felicidad de tocarte, la felicidad de sentir tu calor cuando dormimos, la felicidad de disfrutar de una serie, la felicidad de poder mirar a Papá, la felicidad de usar tu ropa, la felicidad de tomar tu mano, la felicidad de limpiar el patio de nuestro terreno, la felicidad de llegar cansados a casa en un colectivo, la felicidad de esa vianda de comida al mediodía, la felicidad de tener salud y sobrevivir a una pandemia, la felicidad de poder decirte "te amo" cada día, la felicidad de probar tu comida, y la lista puede seguir y seguir... Ves?
Somos felices, hay felicidad en cada una de esas cosas, y como también la felicidad es fugaz, hay que aferrarse fuerte a esos momentos mi niño... Justamente por eso, porque son momentos que no vuelven más! Quiero invitarte a ver lo felices que somos, lo maravilloso de estar vivos, vivos juntos.
Miremos eso... y te regalo uno de mis versículos favoritos:
SALMOS 126:
2 Entonces nuestra boca se henchirá de risa, Y nuestra lengua de alabanza; Entonces dirán entre las gentes: Grandes cosas ha hecho Jehová con éstos.
3 Grandes cosas ha hecho Jehová con nosotros; Estaremos alegres.
4 Haz volver nuestra cautividad oh Jehová, Como los arroyos en el austro.
5 Los que sembraron con lágrimas, con regocijo segarán.
6 Irá andando y llorando el que lleva la preciosa simiente; Mas volverá á venir con regocijo, trayendo sus gavillas.
Confiemos...
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